Una familia se instala en la costa atlántica uruguaya para vivir de la hotelería. Todo contado en tres tiempos, el comienzo esperanzador y pujante, el derrumbe trágico y lo que vino después, un duelo que se llevó los restos.

Esta obra de teatro es una adaptación libre de la historia del canal Andreoni en La Coronilla, Rocha. Allí se priorizó la producción arrocera por sobre la naturaleza y el turismo, abriendo una herida al balnearios de la que nunca más se recuperó.

Lo que no me gustó para nada fue el personaje de la Casandra local, una señora mayor típico cliché de bruta con creencias pachamamezcas. Hubiera sido una gran oportunidad para enaltecer el "tu" y el "ti" del habla rochense . 

Sacando ese reclamo chovinista de pueblo chico, todo bien.